martes, 24 de octubre de 2017
Stranger Things' se supera con una épica segunda temporada
Cuando Stranger Things renovaba por una segunda temporada despues de haberse convertido en la serie por excelencia del verano de 2016 y de haber cautivado por completo a varias generaciones de espectadores, el equipo creativo de la ficción -los hermanos Matt y Ross Duffer y Shawn Levy- tenía una cosa clara: la nueva entrega de la serie tenía que estar a la altura de la primera, eso por supuesto, pero también tenía que ser mejor.
Ha pasado más de un año desde entonces y cada tráiler, cada imagen, cada detalle y cada maravilloso póster-homenaje con los que Netflix ha promocionado el regreso de su serie más esperada hacía crecer nuestras expectativas. Ahora, con el estreno de los nueve episodios de la segunda temporada a la vuelta de la esquina y habiendo tenido la oportunidad de disfrutar de todos ellos, podemos decir que los Duffer lo han conseguido. Es así. Stranger Things se ha superado con una épica segunda temporada.
Si planeas verla del tirón -puedes hacerlo, porque Netflix estrenará la nueva temporada al completo el 27 de octubre-, prepárate para quedarte con la boca abierta ya desde la primera e inesperada escena y no volver a cerrarla hasta el final. La temporada no tiene altos y bajos, sino más bien al contrario: cada episodio consigue subir al tiempo que transcurren las distintas tramas protagonizadas por los personajes, todas unidas por un factor común.
Los nuevos personajes son introducidos perfectamente, haciéndose querer desde el primer minuto que lo hacen y sin olvidarse en ningún momento de los principales protagonistas de esta temporada, como Once o su pandilla. Importante: No perdáis de vista a Max. En cuanto a efectos visuales, se nota mucho que Netflix ha apostado muy fuerte por una de las series de éxito que tiene en su parrilla con efectos, haciendo de un final de lo más épico y que hará que saltes del sitio para gritar de la emoción.
Sin duda alguna, nos encontramos con una nueva e increíble temporada con numerosos guiños a míticas películas de los 80 y los 90, tramas que os pondrá el corazón en un puño y con una sensación de querer aún más a los pequeños protagonistas de Stranger Things.