viernes, 24 de julio de 2015
Así imagina el creador de ‘The Walking Dead’ el final de la serie
The Walking Dead no está ni remotamente cerca de terminar. En octubre se estrena la sexta temporada, y, para entonces, los cómics de Los Muertos Vivientes habrán superado los 130 números. Las audiencias son mejores que nunca y los tomos se colocan siempre como el cómic independiente más vendido. Pero, dure lo que dure, Robert Kirkman, que lleva escribiendo a Rick Grimes y compañía desde hace casi 15 años, ya ha comenzado a plantearse su final, y podría ser más amigable de lo que el espectador se imagina. “Es una historia esperanzadora sobre la humanidad superando esta insuperable situación apocalíptica… Pero les costará mucho tiempo”, explicaba esta semana el guionista en su entrevista al podcast WTF del cómico estadounidense Marc Maron.
“Es obvio que es muy popular y la cadena AMC puede querer que llegásemos a las 50 temporadas, pero tiene que haber un punto final”. ¿Se resolverá entonces el problema zombie? “Posiblemente. Espero que cuando terminen puedan decir ‘menos mal que nos hicimos cargo de ellos”. Kirkman y el dibujante Tony Moore crearon la serie, precisamente, para dar una respuesta a todas esas clásicas películas del cineasta George A. Romero y Lucio Fulci donde todo quedaba sin resolver. “Al final de cada película, nos encontrábamos con la situación de ‘el mundo está plagado de zombies, no nos da tiempo para más, ¡hasta otra!”, explica el escritor en la larga entrevista sobre su carrera y motivaciones. “Todos estaban muertos o caminaban hacia el amanecer. Quería saber lo que pasaba después. Cómo encuentran comida y refugio, cómo proteges a tus seres queridos y te enfrentas durante años a la caída de la civilización, cómo te afecta… Algunos se vuelven fuertes, otros débiles y otros locos”. Eso es lo que le llevó a crear algo distinto. El veterano Romero, que prepara también la adaptación de su cómic de muertos vivientes y vampiros Empire of the Dead, ha calificado la serie como “un culebrón con un zombie ocasional”.
“Es la película zombie que nunca acaba”. El famoso guionista reconoce, aun así, que todo va improvisándose y cambiado tebeo a tebeo, temporada a temporada. Algunos de los personajes están muertos en un medio, pero viven en el otro. Algunas situaciones y protagonistas son exclusivos, y otros momentos, demasiado oscuros, no son adaptables. Todo funciona como un efecto mariposa que trastocará el final en ambos medios. “La gente dice que es muy oscura, pero yo la veo de principio a fin y la veo como una historia esperanzadora”, subraya.
De momento, sin embargo, Kirkman, que es productor y guionista en la serie, planea superar los 300 números en las viñetas, pese a que promete que si se sigue divirtiendo no parará ahí. “Pero si me empieza a aburrir, pararé antes”, asegura también. El productor ejecutivo y show-runner Dave Alpert, por su parte, ha afirmado que tienen mapeado hasta la duodécima temporada. Todavía queda mucho material que adaptar de los cómics mensuales, aunque en las páginas la situación tampoco es demasiado optimista (quizás incluso menos). La sexta temporada, ahora situada en una ciudad idílica, alcanza por fin el momento en el que estaban los cómics –el número 75- cuando comenzó a emitirse la primera temporada.
La temporada será, además, especialmente clave para la producción, dado que el mismo equipo lanza el spin-off Fear the Walking Dead, una historia original que narra cómo se vivieron los comienzos de la invasión zombie en Los Ángeles. Kirkman no descarta siquiera cambiar su objetivo a otros países: “Quizás lo acabemos explorando, pero para mí todo es sobre lo personal, buscar agua, construir una verja. Cuando lo haces más grande, lo haces menos interesante”. Pero si el derivado funciona… “quizás veamos The Walking Dead: China”, bromea.
De momento, el guionista, cuya etapa en Ant-Man inspiró en parte la película Marvel que llega a las salas esta semana y que colabora en el guion de Transformers 5, estrenará esta temporada también la serie Outcast (Paria) en Cinemax, adaptación de su cómic sobre exorcismos, demonios y el fin del mundo. “Enseñamos el piloto y cuando se acabó pensé: ‘tenían que haberme parado, he cruzado una línea, hay demasiado violencia”, anticipa. “Tampoco me gustaba el final de las películas de exorcismo. Libraban del cuerpo al demonio y no seguían investigando para ver de dónde venía y acabar con su origen”.